Los comercios de este rubro volvieron a trabajar luego de tres meses de no poder hacerlo. En general, aquellos que fueron consultados por el diario La Opinión señalaron que este primer fin de semana dejó un balance sumamente positivo.
Luego de que el jueves pasado la Municipalidad de Trenque Lauquen autorizara a que los comercios gastronómicos puedan abrir los fines de semana hasta las 00 horas siguiendo un estricto protocolo de seguridad e higiene, fueron muchos los comerciantes que no perdieron el tiempo y reacondicionaron sus espacios para poder recibir clientes sin ningún tipo de riesgos.
En este marco, La Opinión tomó contacto con referentes gastronómicos de la ciudad quienes contaron cuál fue el balance de esta primera “prueba piloto” de reapertura de sus comercios. Los consultados la calificaron como “muy positiva” debido a que “se necesitaba esta posibilidad de poder trabajar”. Asimismo, se mostraron expectantes con lo que pueda ocurrir las próximas semanas cuando los vecinos se vayan acostumbrando a este nuevo horario y a las condiciones que deben respetarse para que todo se lleve a cabo de la mejor manera.
Reservas
Gabriel Depari, titular de Dublin, el comercio ubicado en la esquina de Sarmiento y Belgrano, comentó cuál fue su experiencia en estos primeros tres días de reapertura: “Sí, efectivamente este fin de semana abrimos nuevamente de 19 a 00 horas, respetando el horario en el que la Municipalidad nos autorizó a trabajar y con todo el protocolo correspondiente cumplido, como debe ser. El jueves a la noche decidimos que el viernes abríamos. El viernes ya desde temprano empezamos a tomar reservas para viernes, sábado y domingo. El viernes trabajamos bien, los clientes se mostraron muy contentos con poder volver salir y disfrutar de unas horas tomando algo. Muchos nos agradecieron por volver a abrir y dijeron estar felices de poder volver a disfrutar del lugar”, dijo.
En el mismo sentido, agregó que “el sábado trabajamos a salón completo, siempre respetando el distanciamiento social entre mesa y mesa y la capacidad reducida al 50% como ya se había acordado. Desde las 19 horas teníamos clientes tomando una cerveza y picando algún snack. A la hora de la cena todos se hicieron presentes permaneciendo hasta el horario permitido”.
“Muy positivo”
Asimismo, el comerciante consultado señaló que “el domingo también desde temprano llegaron clientes, también tuvimos completo el lugar, todos los presentes estuvieron de muy buen humor, con muchas ganas de disfrutar. Lo que nosotros percibimos es que la gente necesita salir del encierro y lo hacen siempre respetando las medidas de seguridad. En esto último no tuvimos que hacer ninguna corrección, de la misma manera con el horario de cierre. Y 10 minutos antes de cerrar, ya se retiraban”.
Depari no dudó en señalar que “este primer fin de semana nos dejó un saldo muy positivo y una gran alegría de reencontrarnos con nuestros clientes. Esperemos que esto siga así y se pueda mantener. Y los que no se animaron a salir se irán animando poco a poco”.
Opiniones dispares
Héctor López está al frente, desde hace más de 10 años, del conocido bar S&S el cual se encuentra ubicado en calle Villegas al 300. Una vez iniciada la cuarentena, debió reinventarse para pasar el momento y abocarse a la producción y delivery de pizzas. Él contó lo que pudo ver en estos primeros días de reapertura de su local: “Quizás la gente no se enteró aún de esta nueva posibilidad de apertura o, quizás, con el bar mío la gente es más reacia a venir solamente a comer o a escuchar música. Otros lugares que tienen una característica más de resto-bar trabajaron mejor. Lo mío estuvo tranquilo, pero sé que, en general, muchos colegas trabajaron bien”, contó.
En cuanto a lo que pudo ver de la gente en lo que refiere a sus ganas de salir o el temor a hacerlo a causa del riesgo de ver afectada su salud, López comentó: “Es dispar la opinión de la gente. Hay gente que no le da demasiada importancia y no toma conciencia de todo esto porque acá aún no tenemos casos. Pienso que hasta que el coronavirus no tenga nombre y apellido (como ya ocurrió con los dos casos que tuvimos hace unos meses) muchos no van a tomar conciencia. Hay gente que está esperando la hora de que se libere todo para salir y hay gente está más reacia a salir de su casa. Personalmente, el primer fin de semana mucho no me sirvió. Pero quizás es falta de difusión, quizás la gente cree que únicamente puede venir a comer y no a tomar algo, a pasar un rato tranquilo, con música suave. Pero vamos a seguir intentando. Veremos qué ocurre en los próximos fines de semana”.
De a poco
El vecino consultado comentó que “creo que la gente de a poco se va a ir soltando. Hay un poco de temor con todo esto y hay otro problema más grave que es el económico. Hay gente que está un poco limitada con ese tema. Pero pienso que debe haber sido productiva esta primera experiencia. Sé que muchos colegas trabajaron bien. Todo lo que se empiece a liberar es bueno, luego se harán los balances. Porque los gastos uno los tiene y la necesidad de estar un poco ocupado también porque, de lo contrario, te agotás mentalmente. Creo que es positivo. El fin de semana próximo será un poco mejor y así sucesivamente. Pienso en positivo y creo que definitivamente lo es”, culminó.
Desde otros espacios locales que desarrollan esta misma actividad se coincidió con este mismo balance: la gente se acercó, consumió, disfrutó del momento luego de mucho tiempo de no poder hacerlo. De la misma manera, todos se muestran expectantes con los resultados que, a futuro, pueda traer la continuación de esta experiencia. (La Opinión)