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jueves, 28 marzo, 2024

Guillermina Lahitte: «Muchas veces nos olvidamos de agradecer y valorar todo lo que tenemos»

La joven oriunda de la localidad de Piedritas es chef. Con residencia actual en Buenos Aires, está ayudando -junto a otras personas que colaboran con ella- a gente que se encuentra en situación de calle

 

Guillermina Lahitte es piedritense. Joven y aventurera, desde ACTUALIDAD se la contactó para hablar de lo que actualmente está haciendo en la ciudad de Buenos Aires, donde reside.

Se reconoció «un poco nómade» a la hora de comenzar la charla. De profesión chef, trabaja con una médica que le deriva a sus pacientes, a los que les enseña a cocinar alimentos saludables.

Desde el mes de enero Guillermina no visita a su familia en la localidad que la vio nacer. Radicada en Buenos Aires, comentó que en aquella ciudad «se ve mucha gente en situación de calle, sobre todo ahora con la cuarentena. La verdad que es algo que me supera, no puedo mirar para el costado».

Fue así que un día «hice una ollita con arroz y verduras; y se lo di a unas personas. Al comentárselo a mi hermana me dijo que les preguntara dónde podía ayudar a más gente. Lo hice y me dijeron que a la vuelta de ese lugar había un chico con una nena de 3 años. No los encontré, pero sí a un grupo de personas que estaba enfrente de Tribunales. Empecé a tener contacto con ellas y a llevarles comida», relató.

«A uno no le sobra», dijo la joven piedritense, pero destacó el hecho de «poder compartir, que la gente pueda tener algún alimento para cocinar».

Inquieta, le contó de la iniciativa a una amiga suya, «Vane, que se ofreció a hacer donaciones. Ella envió muchas cosas; de repente la iniciativa creció y llegaron más donaciones que de a poco les voy alcanzando. También las estoy escuchando, porque lo que más necesitan es ser escuchadas y que alguien les trasmita un poco de fe».

Guillermina no sabe «en qué se va a convertir esto», pero reconoce que despertó en ella el deseo de «ayudar a otras personas y construir algo entre todos. Creo que es necesario empezar a unirnos más como humanos y darnos una mano los unos a los otros, dejando los prejuicios de lado. Creo que todos merecemos tener una oportunidad y sentir que las cosas pueden mejorar».

Ayudar y aprender, de eso se trata, «porque yo estoy aprendiendo muchísimo de todos, de la generosidad de la gente en la calle, ya que entre ellos mismos se ayudan. Hay muchas personas solidarias también. Hay cosas muy buenas que se pueden rescatar. Uno aprende mucho, es un intercambio más que una ayuda», reflexionó.

Además de aquellos que se encuentran en la zona de Tribunales, «también estoy en contacto con otros que están en Congreso. Tienen frío, hambre, no tienen techo, les presto el teléfono porque están gestionando con el gobierno cómo irse para alquilar algo. Hay mucha gente que no quiere estar en la calle. Es una realidad que nunca había visto antes. Si todos ponemos un granito de arena, podemos generar cosas muy lindas», dijo.

Si bien en Buenos Aires la gente en situación de calle ha sido siempre parte del paisaje porteño, para la joven piedritense esto se acrecentó a partir de la cuarentena, «porque antes salían a ganarse el día de alguna manera y ahora no pueden. No tienen ni para pagar el cuarto que alquilaban. Es difícil».

 

En actividad y con planes

Guillermina continúa trabajando en la cocina aún en cuarentena, pero también rescata otro aspecto menos estructurado. «Logré estar conectada conmigo misma, con Dios, estoy muy bien. Siento que tengo planes, sueños y eso me motiva para estar presente, ‘meterle’ pilas, ganas y alegría. Muchas veces nos olvidamos de agradecer y valorar todo lo que tenemos».

Con la posibilidad de trabajar en California desde el mes de septiembre, previo a eso su idea es volver a Piedritas para enseñar a cocinar con alimentos saludables en diferentes lugares, para de esa manera sumar experiencia.

«Pero es tanta la incertidumbre, que la única certeza que tenemos es hoy. Hay que aprovecharlo, estar contentos y poder hacer cosas lindas. Veremos», concluyó.