22 C
General Villegas
jueves, septiembre 26, 2024

Un villeguense en la trinchera

spot_img
spot_img

Se llama Sergio Staffieri y trabaja en la terapia intensiva de varios hospitales y centros de salud que atienden a pacientes con coronavirus. «Les digo que por favor respetemos la cuarentena, se viene algo jodido», sentenció.

Sergio Staffieri es un villeguense de 37 años, profesor de educación física y kinesiólogo. Hizo su residencia en el Hospital Británico y se especializó en la parte clínica de kinesiología, que es la especialidad de terapia intensiva o cuidados críticos. Actualmente trabaja en un clínica que se llama Remeo Center con pacientes ventilados (con respirador), en la terapia intensiva del hospital «Dr Abete» de Malvinas Argentinas y recientemente ganó un cargo provincial por concurso para trabajar en la terapia intensiva del hospital Ramón Carrillo de Ciudadela.

Atender todos los días a pacientes con coronavirus es parte de su trabajo. Es por ello que tiene que extremar las medidas de seguridad para no exponerse a ser contagiado. Literalmente, cada vez que pisa la terapia intensiva parece un astronauta. En diálogo con FM Actualidad contó cómo son sus días «en la trinchera» y advirtió a la población villeguense acerca de la peligrosidad de lo que se viene.

«Soy especialista en terapia intensiva y en cuidados respiratorios críticos. Hace ya 5 años que me dedico a esto. Mucha gente desconoce al kinesiólogo respiratorio o de terapia intensiva y nosotros somos los que más cercanos estamos a estos pacientes. En el hospital de Malvinas ya hay varios casos con coronavirus por lo cual tenemos mucho trabajo. Hicieron una sala especial para pacientes con COVID-19. Hay siete casos y dos de ellos en respiración mecánica, los otros con oxígeno», señaló Staffieri.

En cuanto a los cuidados preventivos, el villeguense manifestó lo siguiente: «Todo se rige en base a protocolos de infectología. Tenemos vestimenta especial, barbijos N95 -que tienen mayor protección de partículas-, cofias, máscaras. Es mi primera experiencia con una pandemia y la verdad es que estando 20 minutos trabajando con esos trajes el calor es inaguantable. Salis con dolor de cabeza: con el dióxido de carbono mismo que exhalamos salís mareado».

Y añadió: «Esto es como una película. Uno no lo espera, pero estamos preparados. Nos actualizamos a través de cursos vía web porque es todo nuevo. La curva viene aplanada. Estamos trabajando en forma tranquila, no estresante, pero se esperan más casos con el invierno».

Por último, y con el conocimiento de estar en el lugar donde realmente se libra la batalla contra el coronavirus, advirtió a la comunidad villeguense acerca de la peligrosidad de lo que se viene.

«Me preocupa que la gente no tome consciencia de esto. Por suerte en provincia y en capital se han dado cuenta y ha bajado el ritmo de tránsito. Igual se ve mucha gente circulando y no se puede creer. Esto no es para tomarlo a chiste. Me preocupa la gente que trabaja día a día, médicos y enfermeros, que puedan tener las medidas de bioseguridad. En muchos hospitales no hay barbijos o trajes. Eso me preocupa: el cuidado al personal de salud. Es preocupante porque es un virus que se disemina muy rápido. Hay que cuidarnos entre todos. Por eso les digo que por favor respetemos la cuarentena, se viene algo jodido. No es para dar miedo, pero estamos ante una situación sanitaria peligrosa», concluyó.

José Luis Soto, veterano de otra pandemia

El Licenciado José Luis Soto es miembro de AAMR (Asociación Argentina de Medicina Respiratoria) y de SOLACUR (Sociedad Latinoamericana de Cuidados Respiratorios), es el jefe de Remeo Center (y por lo tanto es el superior de Sergio Staffieri) y también es jefe de terapia intensiva del Hospital Británico.

Soto tiene en sus espaldas otra gran batalla: la lucha contra la gripe A (H1N1). Para el profesional de la salud, la pandemia del año 2009 fue mucho más agresiva que el coronavirus. Sin embargo no relativizó al COVID-19.

«Creo que la Argentina está preparada para esta situación. La relación respirador/cantidad de habitantes es mejor en Argentina que en Europa. Sumado a las decisiones del gobierno que fueron a tiempo. La sociedad médica de nuestro país es muy responsable, el profesional de la salud de la Argentina es muy valorizado en todo el mundo y eso es porque hay un trabajo multidisciplinario muy bien hecho, cada uno conoce su rol en cada situación. Después de 30 años en terapia intensiva me doy cuenta que el profesional argentino es querido porque sabe trabajar en equipo. Eso hace que la Argentina esté mejor preparada, lo cual no significa que no vayamos a tener problemas», argumentó Soto.

«No nos tiene que pasar como en España, Italia y Estados Unidos que tomaron el toro por las astas tarde. Esa curva tiene que bajar. Pero sigamos cuidándonos, lavándonos las manos y cambiándonos de ropa cuando entremos a casa. Eso nos da la posibilidad de que la curva epidemiológica baje», fue su mensaje final.

spot_img