El empresario Pyme y economista Gustavo Lázzari (55) visitará General Villegas el sábado 4 de diciembre para dar una conferencia que lleva como nombre «Cómo llegamos, cómo estamos, hacia dónde vamos».
Lázzari, quien fue candidato a diputado nacional por la ciudad de Buenos Aires por Juntos por el Cambio dentro del Frente Republicano que lidera Ricardo López Murphy, dará su conferencia en el Teatro Español, desde las 19 horas, en una propuesta libre, gratuita y destinada a «público en general, comerciantes, emprendedores, productores, empresarios y trabajadores», según anunciaron los organizadores.
Su llegada fue anunciada por el piedritense Nicolás Canaparo, de la firma Yapai SRL, que auspicia la conferencia.
Gustavo Lázzari, fanático de Nueva Chicago, de presencia periódica en distintos canales de televisión y dueño de un estilo vehemente, es hijo de la recordada Ángela María Palermo de Lazzari, más conocida como Lita de Lazzari, «un emblema indiscutido para las amas de casa, siendo ella misma presidenta honoraria de la Liga de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios de la República Argentina», rescatamos del obituario del diario La Nación.
Lita fue habitué de los programas televisivos – de hecho llegó a tener uno propio – en el que impartía conocimientos sobre consumo mediante contundentes frases como «caminen, chicas» o la clásica «busquen precio».
Su hijo Gustavo, con matices, encarna el espíritu de su madre. “Cuando la crisis es inflacionaria, como la actual, lo que no podés hacer es dormir ni pestañear”. «Fabrico alimentos, con ello intento salvar al mundo.» «Argentina puede ser Australia en cinco años.» “Correr, meter, jugar, pensar”. «Mi sueño: que cada argentino cargue sólo las mochilas que lo hacen feliz. Sin impuestos ni permisos.», tiró sin dudar en ámbitos periodísticos.
Además, Gustavo Lázzari gerencia el frigorífico Cárdenas, dedicado a la producción y comercialización de chacinados. La empresa, nacida en 1964, cuenta con 43 empleados, en su totalidad de un alto nivel de calificación. Luego de un proceso de reorientación, hace dos años decidieron producir menos a mejores marcas. Pasaron de 130 toneladas al mes, a producir 80 en la actualidad. “Cambiamos el mercado de objetivos. Cuando querés hacer más kilos, tenés que ir a productos baratos y necesitás economía de escala para hacerlo, y yo no tengo esa capacidad de producción. Me conviene más el producto de nicho”, sostiene. La fábrica está orientada a los fiambres y chacinados. “Procesamos carne de cerdo. No mezclamos con otros animales”, aclara.