Juan Pablo Del Vecchio, a cargo de Defensa Civil de General Villegas, se mostró sorprendido por la imprudencia de muchas personas que, en medio de la furiosa inclemencia del temporal del sábado, ponían sus vidas en riesgo saliendo de la seguridad de sus hogares. «La gente en medio de la tormenta iba a comprar helado. Estamos todos locos. Yo no expongo a mi familia a eso bajo ningún punto de vista», manifestó azorado.
«Cada vez se está intensificando más la magnitud de las tormentas. Hubo 35 voladuras de techo, entre total y parcial. Además hubo diferentes tipos de problemas como el colectivo que despistó en la ruta, un camión que también despistó en la ruta, cables cortados, columnas, gajos y plantas arrancadas. A diferencia de otras tormentas, en ésta hubo casas con peligro de derrumbe. Se han rajado paredes», detalló Del Vecchio en referencia a los daños ocasionados por el temporal.
«Cuando salí de mi casa no se veía ni a dos metros por la forma en que llovía. A eso sumado el viento y el agua que se había acumulado en las calles. Te ponés a pensar si llega a haber un cable o si se cae una palmera. Trabajando empecé a ver un montón de gente que andaba recorriendo, viendo qué pasaba o qué hacíamos. Una locura. He visto familias enteras arriba de un auto cuando nosotros estábamos esquivando cables, plantas, chapas, maderas con clavos», expuso el jefe de Defensa Civil.
Volvió a insistir en la misma recomendación que brindan todos los especialistas: «No salir de nuestras casas. No tocar paredes, no tocar rejas. Y dejar a la gente que está trabajando total libertad de trabajo», subrayó.
Por último, Del Vecchio destacó la muy buena logística y coordinación entre Defensa Civil, Bomberos y Municipalidad.
