«Fue un discurso propio de un año electoral. Fue el lanzamiento de una plataforma, con un pensamiento a futuro, porque muchas de las cosas que se dijeron por ahí son con visión de futuro, cosas que se pueden lograr má adelante. Estamos hablando de 60 millones de pesos en obras que el Concejo Deliberante no ha aprobado.
Fue un discurso pre electoral. A mí me hubiera gustado escuchar más realismo. Más verdad. Más de las consecuencias que hoy están sufriendo los vecinos de los distintos pueblos del partido.
Ademá, no podemos hablar abiertamente de empleo en una sociedad que precisamente está sufriendo la pérdida de empleo en una zona como la nuestra, donde el puntapié lo da la zona agrícola ganadera, que ha sufrido los embates de las inundaciones y la sequía, y donde la provincia llegó tarde con los recursos y no nos miró de manera diferente.
En algún momento me sentí como que no estaba en Villegas. Sentí que estaba en otro lugar donde las cosas se hacían. Donde a veces hablan de la grieta y precisamente damos pasos para atrás quedándonos en la mera crítica.
Como ciudadanos tenemos que aprender mucho de la democracia, de decir las cosas como son. Se habló de apoyo a las instituciones y si algo no se hizo fue justamente eso: apoyar a las instituciones de los pueblos, a los clubes. Estuvo ausente la cultura.
Y si bien se hicieron cosas, no digo que no, quizás no fueron estratégicamente importantes para lo que Villegas necesita. Es un discurso que dejó un poco que desear.»