Enzo Galli, un villeguense que reside en México desde hace cinco años, le comentó a Actualidad cómo es la realidad del coronavirus en el país centroamericano: números oficiales dudosos y medidas de seguridad que brillan por su ausencia.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se caracteriza por tener una posición muy relajada frente al coronavirus. Días atrás, el mandatario azteca instó a la población a que salgan a comer afuera, relativizando los daños que el COVID-19 ha causado en muchos países así como el peligro que implica la frontera con Estados Unidos (uno de los principales focos de infección a nivel mundial).
Junto a su pareja y su pequeño hijo, Enzo Galli -villeguense de nacimiento- vive en México Distrito Federal, una de las ciudades más populosas del mundo. La situación del país azteca no es de gravedad como en Italia o España -de hecho sus números de infectados y muertes son bastante similares a los de Argentina-. No obstante, una parte de la población está preocupada porque el presidente López Obrador no toma medidas preventivas (como lo hace la gran mayoría de los países del mundo) y se caracteriza por minimizar al virus.
«En líneas generales la gente no es consciente de la situación. Tampoco las medidas oficiales han ayudado a que la gente tome verdadera dimensión. Al día viernes había reportados 848 casos y 18 muertos. Hay 2600 casos en análisis. Probablemente haya muchos más porque, al día de hoy, todavía no está hecha una cuarentena oficial. Varias compañías, con casas matrices en Estados Unidos y en Europa, ya lo implementaron hace 10 días y a la mayoría de los empleados los enviaron a hacer ‘home office’ (trabajo remoto desde el hogar). Pero los comercios, supermercados, bares, restaurantes y demás recién este fin de semana empezaron a cerrar operaciones de venta al público. La gente todavía descree un poco de la situación real», afirmó Enzo.
«Si bien acá es verano y eso ayuda un poco con el tema de la temperatura, el panorama es que esta situación tenderá a agravarse rápidamente porque hay mucha gente circulando, hay mucha gente pudo haberse contagiado. El aeropuerto está operativo, hasta el día de hoy inclusive. Se dice que van a pasar a la fase 3, pero todavía no es oficial: se está empezando a recomendar que la gente se quede en la casa. Recién ahora es como que están empezando a tomar dimensión. Hay mucha información que no está abierta a la comunidad, no están siendo claros en los mensajes. Esto puede ser una bomba de tiempo. Esperemos que no, pero no es muy prometedor el panorama», concluyó el villeguense.