Algunos comercios volvieron a abrir sus puertas y a atender al público. Es un motivo de alegría, pero la crisis y los más de 40 días sin trabajar les quitaron las ganas de celebrar. Además, hay algunos rubros que todavía no pueden trabajar con normalidad y eso preocupa al sector. Los comerciantes que regresaron a la actividad deben respetar un estricto protocolo de seguridad o pueden ser sancionados.
Finalmente el grupo de comerciantes que presionaba para que el intendente y el Comité de Crisis levanten las restricciones y los dejen trabajar logró su cometido: el comercio villeguense lentamente está volviendo a atender al público.
Un grupo de cerca de 80 comerciantes se organizaron para hacer visible su reclamo. David Potes forma parte de ese grupo. Si bien su rubro es otro -es productor agropecuario-, su esposa es comerciante y por eso conoce de cerca cuáles son los pormenores y la difícil situación que atraviesa el sector.
«Estamos contentos por el resultado, pero no estamos para festejar. Todavía tenemos rubros que están fuera de la flexibilización, como los bares, los restaurantes, los hoteles y gimnasios que están en esa situación. Queremos darles la tranquilidad que seguimos trabajando y que nos ponemos en su lugar. Esa era la idea desde la primera carta que se elevó al intendente. Sabíamos que la única forma de salir de esto era en forma paulatina. Cuanto antes lográramos flexibilizar una parte de los rubros, este otro sector también iba a estar más cerca», afirmó Potes en diálogo con Actualidad.
Y añadió: «El tiempo es fundamental. Una semana que pasa puede ser irreversible para algunos comercios. La economía también tiene su sector vulnerable y el problema es que se puede causar un daño que no se puede medir. Las muertes, lamentablemente, se cuentan, pero en el caso de la economía aún no sabemos qué va a suceder, qué daños podria causar en el tiempo. Por eso hay que ser muy dinámico y no demorar mucho tiempo en la toma de decisiones».
Para Potes el gran problema del virus es el contagio comunitario masivo. «Ese problema acá no lo tenemos», reflexiona. «Acá no tenemos densidad poblacional, no hay fábricas, la única es Remotti, en el parque industrial hay pequeñas empresas con poco personal. El sector municipal emplea mucho personal, pero no está trabajando al 100%», subrayó.
Los comerciantes se organizaron por fuera de la Cámara de Comercio para efectuar el reclamo ante la Municipalidad, pero Potes reconocer que «se necesita volver a fortalecer la Cámara de Comercio como institución. Sería importante un rearmado de la misma porque este problema no terminó con la reapertura de los comercios. Estos más de cuarenta días de inactividad van a tener un costo y ahí debe intervenir la Cámara de Comercio para poner en la mano de estos comerciantes herramientas útiles a los fines de que puedan sobrellevar la situación que se avecina. Esto tiene que ser una relación simbiótica: la Cámara necesita de los comerciantes y a los comerciantes les va a ser útil que la Cámara se fortalezca».
«Por ahora coincidimos en que lo importante es la reactivación de los rubros que faltan incluir en la flexibilización del comercio. Esperemos volver a reunirnos con el intendente, esa es la idea de nuestra parte. Queremos reactivar el resto de los rubros», concluyó.
