Para Graciano Córica la pandemia cambió el mundo tal como lo conocíamos pero, al mismo tiempo, brinda una oportunidad: la de realizar cambios estructurales para que el sistema educativo se adapte de una vez por todas al siglo 21.
La decisión del ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, en conjunto con los ministros de las provincias, de que ningún alumno repita de año y que la promoción se defina en 2021, despertó opiniones encontradas. Hubo muchas personas que se preocuparon por el nivel educativo de los alumnos de los diferentes niveles y otros que remarcaron que era imposible evaluarlos en un año tan atípico.
Graciano Córica, referente de UDEB General Villegas, fue consultado por Edgardo Bonetto. El docente manifestó que «el tema es complejísimo porque venimos de estar muy acostumbrados a un sistema de premios y castigos en la escuela, en donde la nota sería como la variable de ajuste. Al desaparecer la nota numérica muchos compañeros sienten que no tienen herramientas para hacer trabajar a los chicos».
Y agregó: «Hay un sondeo de parte de los inspectores para ver si podemos hacer algo con los chicos de sexto, aunque sea un encuentro presencial. Sin embargo, son todas especulaciones porque los contagios a nivel nacional no paran de subir. Nosotros en General Villegas vivimos una irrealidad, pero aquí cerca, como por ejemplo Rufino y Venado Tuerto, la situación está cada vez más complicada. Hay muchos profes que vienen de ahí. El traslado de esos profes, el cruce interprovincial, la realidad de nuestro distrito es muy compleja. Tenemos escuelas muy grandes, con más de mil personas por día, como en el Nacional. A nosotros desde UDEB nos parece prudente y sensata la decisión».
Para Córica lo más importante es que los alumnos aprendan y no solo que aprueben: «Queremos que puedan desarrollar herramientas para desenvolverse en un mundo que ya no es más como el que conocíamos. Será tiempo de revisar los parámetros y paradigmas educativos y ver qué otros modos de educar podemos encontrar en un siglo 21 que ya nos está presentando desafíos enormes. En Europa están viendo cómo regresan, ya se está hablando de un sistema mixto: una modalidad en parte presencial y en parte virtual. Es un año de mucho desafío, la enorme mayoría de los docentes nos hemos sentido confundidos, con angustia, con mucha incertidumbre, con culpa cuando los alumnos no responden. Será cuestión de ver cómo seguimos piloteando esta tormenta», reflexionó.
