Calle Pichincha. Las primeras cuadras con asfalto y cordón cuneta, luego un empedrado con bastantes pozos y bastante maltrecho. Más allá el barro intransitable. Calles de tierra, sin cordón cuneta, ni ninguna clase de infraestructura. El agua que no corre hacia ninguna lado y forma una enorme pileta de aguas oscuras y pantanosas.
Son pocas cuadras, pero la asimetría de calidad de vida entre los vecinos que viven en la Chassaing Sur y los que habitan el barrio ex Quinta de Migliore es abismal. Los primeros están en el primer mundo: secos, calentitos y con todos los servicios. Los otros parecen que viven en una tierra que fue bombardeada.
Lo cierto es que con las abundantes lluvias precipitadas en General Villegas algunas familias de los barrios periféricos de General Villegas, como por ejemplo Los Cardales y ex Quinta de Migliore, comenzaron a sufrir las consecuencias: calles anegadas y, lo peor de todo, casas llenas de agua (lo cual siempre conlleva un riesgo a sufrir algún accidente, sobre todo en viviendas precarias donde las instalaciones eléctricas no son del todo seguras).
En la mañana de este sábado algunos vecinos de la ex Quinta de Migliore se quejaron de que el municipio no los había asistido luego de las copiosas lluvias que se registraron en los últimos días. Manifestaron que se les había inundado todo y que, al contactarse con alguien de la Municipalidad, les habían dicho que no los podían ayudar por ocupar terrenos usurpados.
Actualidad consultó a la secretaria de Desarrollo Social, María de los Ángeles Trojaola, quien remarcó que desde su área estaban aguardando que deje de llover para ir a los barrios a asistir y así evitar que los colchones y las frazadas vuelvan a mojarse.
«Vamos a tratar de reemplazar todos los colchones y frazadas, todo lo que tenga que ver con lo existencial. Son terribles las condiciones en las que están. Son lugares privados y el municipio no puede avalar una usurpación. Se van a hacer las gestiones posibles para ver si se puede solucionar eso, pero esos terrenos son privados. Nosotros lo único que podemos hacer es acompañar con lo asistencial. Desde el jueves estamos asistiendo. Toda la gente que lo solicitó se la asistió. En algunos casos pudimos lograr que se vayan a la casa de la madre, que les cedió una parte del terreno. Allí los vamos a poder acompañar para que se hagan una habitación aunque sea. Pero hay gente que no quiere salir de ese lugar. Es muy difícil. Me aterra por la situación de los chicos. Por eso salimos a los barrios con todas las asistentes, incluso con el Servicio Local, para que por lo menos estén calentitos y secos», aseguró Trojaola.
Y agregó: «Lo estructural no lo podemos solucionar. Nosotros estamos ayudando a un montón de gente que está construyendo su casa, que se está construyendo una habitación. Todos los días estamos entregando materiales. Pero esta gente… un grupo está viviendo sobre una calle. Es un barrio planificado y ahí va una calle. En otros casos la gente construyó en terrenos particulares que no fueron cedidos al municipio».
Quienes necesiten asistencia deberán comunicarse con la guardia de la Secretaría de Desarrollo Social: 03388-15526611.
Un problema que se hace visible cada vez que llueve o hay una inundación, pero que en realidad sigue estando presente incluso cuando hay sequía. Se trata de familias de villeguenses que viven en viviendas precarias, sin servicios, sin escrituras, algunos en terrenos usurpados y otros donde debería ir una calle. Es necesario que se lleve a cabo cuanto antes un ordenamiento territorial y una fuerte obra de infraestructura que les permita a esos vecinos vivir dignamente.