Como parte de la semana de Semana de la Concientización y Prevención de la Muerte Súbita, Actualidad se puso en contacto con el Dr. Pablo Peralta para hablar de esta afección que refiere a la pérdida de las funciones vitales (conocimiento, pulso, actividad eléctrica cardiaca y paro respiratorio).
«La definición de muerte súbita cardíaca es aquella muerte que se produce de manera repentina e inesperada en una persona que previamente estaba sana», indicó el médico.
Peralta agregó que «puede haber pequeños indicios, pero la clave es la prevención, para evitar que estos eventos catastróficos sucedan.»
Según el profesional, hay que distinguir «la causa que originan estos cuadros (que va a depender de la edad porque las causas van a ser distintas).»
Menores de 35 años
En los menores de 35 años, está claramente identificado que ciertas patologías cardíacas estructurales o eléctricas son la causa de la muerte súbita en jóvenes.
La enfermedad que afecta al músculo del corazón (miocardiopatía hipertrófica), es la que origina la arritmia (evento común que tienen todos los cuadros de muerte súbita: fibrilación ventricular).
Esta patología afecta el miocardio (el músculo del corazón) y hace que las paredes se engrosen. Esto es lo que origina la causa del trastorno eléctrico que genera la fibrilación ventricular.
«Esa es la causa más común en los menores de 35 años, además de ciertas alteraciones a nivel eléctrico propio del corazón, como una patología que se llama Síndrome de Brugada» donde hay «ciertas alteraciones a nivel iónico que genera directamente la arritmia ventricular», explicó.
Mayores de 35 años
En los mayores de 35 años, la causa es la enfermedad coronaria (obstrucción de las arterias del corazón por distintos factores: el sobrepeso, la obesidad, la hipertensión, el tabaquismo, la diabetees, el sedentarismo, entre otros.
«Como especialistas, tenemos que apuntar a identificar esos factores de riesgo para los pacientes que puedan llegar a sufrir muerte súbita, de acuerdo al grupo de edad en que se encuentren», y remarcó que «por eso es tan importante, en los pacientes que hacen actividad deportiva, sobre todo el alto rendimiento, hacer una evaluación cardiológica completa e individualizada.»
Esto quiere significa que se debe realizar «un electrocardiograma porque ahí podríamos ver esos trastornos eléctricos que predisponen a este problema cardíaco; un ecocardiograma, que hay que hacer aunque sea una vez en la vida, porque este problema en el músculo del corazón se desarrolla desde el nacimiento y con solo hacerlo una vez, es suficiente para descartarlo, si es que el paciente no sufre esta enfermedad; y, una prueba de esfuerzo (ergometría) en la que se controla mientras el paciente está haciendo una actividad física intensa y adecuada a su capacidad funcional», sostuvo Peralta.
En los mayores 35 años, hay que trabajar en todos estos factores de riesgo que podrían llegar a tapar las arterias del corazón.
El rol de la pandemia
Según explicó el Dr. Pablo Peralta, «la pandemia por covid19 ha abierto un gran interrogante sobre la patología que puede originar y las secuelas que puede dejar la infección por este virus.»
«De hecho, -agregó- hay infinidad de reportes a nivel mundial sobre la afección que puede dejar a nivel de todas las arterias del cuerpo y en particular, a nivel del corazón.»
«Estamos viendo ahora, una vez que ha sido superada la pandemia, la afección de problemas cardíacos, en pacientes jóvenes sin factores de riesgos cardiovasculares, sin antecedentes cardíacos, que han sufrido de infartos de miocardio e incluso la muerte súbita de la que estamos hablando», señaló.
«Para nosotros -reconoció el médico-, el virus sigue siendo una caja de Pandora» en la que «vamos descubriendo nuevas complicaciones a medida que pasa el tiempo.»
Peralta recomendó que «en aquellos pacientes que han sufrido la infección por covid, sobre todo los que han estado graves, es fundamental la realización del control médico.»
La pandemia alejó a los pacientes de los consultorios. Por miedo al contagio, se dejaron de lado los controles de otras enfermedades preexistentes.
El profesional afirmó que «hoy estamos saturados de pacientes que han retomado las consultas después de haberlas postergado por la pandemia. Hay volver a consultar a sus médicos de cabecera, hacer los exámenes complementarios y ver a los especialistas que crea oportuno el médico de cabecera que tengan que ver.»
La vital importancia de aprender la técnica de RCP
Ha sido noticia en todo el mundo, el caso de una joven atleta chilena, que tras correr la media maratón en la ciudad de Buenos Aires, fue reanimada por un equipo de emergencias.
Sobre esto, el médico destacó que «está estudiado que una vez que un paciente sufre un paro cardiorespiratorio, esto de muerte súbita por arritmia ventricular, por cada minuto que pasa, sin que se le haga RCP, van cayendo en un porcentaje del 10% las probabilidades de sobrevida. Quiere decir que, pasado 10 minutos sin que nadie le haya hecho RCP, las probabilidades de sobrevida son prácticamente nulas.»
Por eso, el valor de dar visibilidad y generar conciencia sobre la importancia de estar entrenados en maniobras de RCP, que es uno de los objetivos de esta semana de concientización impulsada por la Federación Cardiológica Argentina.
Peralta insiste en la importancia de aprender la técnica de reanimación cardiopulmorar y además, de «tener a disposición estos aparatos que se llaman desfibrilizadores externos automáticos conocidos con las siglas DEA, que puede utilizar cualquier persona, no es necesario contar con mínimos conocimientos en medicina o en enfermería.»
El DEA, según detalla el médico, es un aparato muy sencillo, «simplemente hay que pegar los electrodos y como es automático, hace el registro de identificación y tratamiento de esa arritmia ventricular, si es que el paciente la está sufriendo.»
«Hay que trabajar en políticas de salud, para que en los lugares donde corresponde que estén estos dispositivos, se trabaje en la capacitación de personas para realizar la RCP» y «también debe ofrecerse a la comunidad esta capacitación, si alguien tiene la motivación propia de aprenderlo», aconsejó.
A qué grupo afecta más
Peralta informó que «la muerte súbita es mucho más frecuente en el grupo de pacientes mayores de 35 años donde todos los factores de riesgos cardiovasculares los afectan más», pero remarcó que «hay que hacer hincapié en los menores de 35 años, que van a hacer grandes esfuerzos en las prácticas deportivas.»
Antecedentes familiares
El especialista en cardiología indicó que «hay patologías que son hereditarias, como el Sindrome de Brugada, que es trastorno eléctrico primario, que es hereditario. Cuando identificamos un paciente que tiene este trastorno eléctrico, tenemos que estudiar a familiares de primer grado, porque puede ser que también sean portadores de esta enfermedad y se puede prevenir.»
A estos pacientes se les coloca dentro del cuerpo un desfibrilador implantable (un DEA de muchísimo menor tamaño que previene la muerte por arritmia haciendo la descarga eléctrica y desfibrila el corazón.
Prevención
El Dr. Pablo Peralta detalló medidas de prevención, aunque aclaró que «esto ayuda, pero no decir que no se va a dar un caso de muerte súbita. A eso nadie lo puede asegurar», pero es importante:
- Tener hábitos de vida saludables.
- No fumar.
- No tener sobrepeso.
- Hacer actividad física.
- Si se sufre una enfermedad, hacer un buen control (hipertensión, diabetes, aumento de los lípidos en la sangre que tapa las arterias, el colesterol elevados). Hay que hacer control para saber si la medicación y la dosis es suficiente).