Las entidades del sector aseguran que, con estos números, se está en presencia de una emergencia nacional. Denuncian el incremento de los costos de producción, los tarifazos y la caída brusca del consumo.
La Federación Panaderil de la Provincia de Buenos Aires denunció que. en lo que va del año, ya tuvieron que cerrar cerca de 300 panaderías en todo el territorio bonaerense.
El titular de la entidad, Emilio Majori, señaló que «con estos número estamos ante una emergencia nacional, están destruyendo el aparato productivo».
Según las entidades del sector, el costo de la bolsa de harina de trigo en marzo de 2018 era de $350, mientras que en abril de este año el precio de la misma materia prima se ubica en los 850 pesos.
«Los costos de producción son cada vez más elevados, los impuestos son muy altos y a esto se suma el alto grado de informalidad que atraviesan las panaderías y la caída del consumo en el sector», añadió Majori.
En tanto, desde la Federación Argentina de Industrias de Pan (Faipa), recordaron que que este año se decretó la emergencia nacional para el sector, luego de que mil comercios bajaran sus persianas en el 2018. (La Tecla)