El presidente de la Cooperadora de la Escuela N° 1 habló ayer del evento del año del establecimiento educativo. Si bien concurrió menos gente que en 2018, dijo que el balance es positivo
La Escuela N° 1 realizó el sábado su tradicional remate y para ello debutó en su casa, ya que se llevó a cabo por primera vez en el SUM del establecimiento educativo que se encuentra sobre calle San Martín, frente a la Plaza Principal.
«Fueron días intensos de trabajo, pero el balance es positivo. Si bien no hubo tanta cantidad de gente como en otros remates, para nosotros fue exitoso», dijo el presidente de la Cooperadora, Gastón Arribas.
Aún con números que cerrar, Arribas recordó que el objetivo final de lo recaudado es el cambio de pisos de la institución. «Ya tenemos comprados los mosaicos, pero nos falta el resto de los materiales y el costo de la mano de obra. La idea obviamente es acercarnos cada vez más a lo que necesitamos».
En este sentido, informó que para concretar el proyecto se requiere una inversión de alrededor de 500 mil pesos, por lo que desde la Cooperadora se continuará trabajando para acercarse cada vez más a ese número.
«Si todo marcha bien, tenemos previsto que los trabajos se lleven a cabo en el mes de enero, para las vacaciones de verano, por lo que tenemos por delante algunos meses para seguir reuniendo fondos. Tenemos varias ideas para lograrlo», expresó Arribas; al tiempo que agregó que «también pensamos pedir apoyo a la Municipalidad por la mano de obra».
Por otro lado, manifestó que el balance también fue positivo en cuanto a que este año el remate se llevó a cabo en el SUM de la escuela. «Se pudo distribuir todo de una manera organizada y estuvimos cómodos, además de que nos ahorramos el dinero de alquiler que hemos pagado en otras oportunidades. La intención es seguir haciéndolo en nuestra casa, mientras nos sigan autorizando para eso», sostuvo.
Por último, agradeció «a la gente que se acercó y participó del remate; y a los rematadores, por colaborar con nosotros en forma desinteresada».