El precandidato a intendente de General Villegas por Juntos por el Cambio redujo la PASO del próximo domingo a lo local, más específicamente a la interna entre su precandidatura y la de Campana. En caso de ganar, dijo que realizará un gobierno de cercanía con la gente y las instituciones.
«A los que tienen dudas les digo que con la boleta de Gilberto Alegre alcanza. Con eso basta para cambiar la historia de Villegas por los próximos 4 años».
La frase pertenece al ex diputado nacional y actual precandidato a intendente de General Villegas de Juntos por el Cambio, Gilberto Alegre, y logra resumir a la perfección cuál es su estrategia de campaña: dejar de lado los candidatos a presidente o gobernador para centrar la mirada, pura y exclusivamente, en el plano local. Pero no sólo eso, Alegre reduce la PASO a la interna y disputa que mantiene con Eduardo Campana (su adversario dentro de Juntos por el Cambio), ocultando a los otros dos precandidatos (Sol Fernández y Omar Olaizola).
«Con que pongan mi boleta sola en la urna ya alcanza. No hay otra decisión, otra interna en Villegas: el domingo la única elección que hay es Campana o Alegre. La única que define es la elección de Campana y Alegre. Las otras se definen en octubre. Sol Fernández y Omar Olaizola necesitan 375 votos, que es una cifra insignificante. La importante es la elección de Alegre y Campana porque define los próximos 4 años. Si gana Campana será candidato, y si ganó yo seré el candidato. Por eso la decisión del domingo para Villegas es muy importante. No hay que discutir candidaturas nacionales o provinciales, nosotros lo que estamos disputando es el gobierno de Villegas», remarcó el experimentado político.
La lista de candidatos en función de las necesidades
«Advertimos las demandas de la sociedad, como la carencia enorme en la salud. En los pueblos y en Villegas el área de la salud es algo muy relevante. Hoy en día, en plena campaña, en el Hospital te dan turno para septiembre. Eso significa que algo no está funcionando bien. Para demostrar nuestro compromiso con la salud llevamos, como 1° precandidata a concejal, a Fernanda Bonelli que estuvo 10 años en la administración del Hospital», explicó.
El ex jefe comunal aprovechó para deslizar algunas críticas hacia la gestión de la salud en el gobierno de Eduardo Campana, subrayando que la coparticipación cayó y que el distrito de General Villegas perdió 80 millones de pesos. «Ese es un tema de debate que el gobierno quiere ocultar», fustigó.
«En terrenos, viviendas y acción social también hay preocupación. No se hicieron barrios, no se construyeron viviendas. Por eso pusimos a Oscar Trojaola, que siempre ha estado relacionado con esas cuestiones. Al gobierno le entró el apuro y ahora están firmando convenios, pero son solo promesas. Uno tiene derecho a desconfiar de las promesas de ahora porque ya prometieron y no cumplieron», argumentó.
Silvina Riat, precandidata a 3° concejal, le aporta a la lista de Alegre su conocimiento en el ámbito de la salud, pero también le brinda una apertura política hacia otros espacios ideológicos.
«Pusimos gente con experiencia, como Silvia Álvarez, Marcelo Betanzo y Oscar Álvarez; pero también muchos jóvenes creativos y talentosos, como Alejo Arias y Damián Gutiérrez. Esta lista es una representación de lo que queremos para Villegas. Tenemos mejores proyectos y mayor trayectoria», destacó.
Lo pasado, no pisado
La estrategia discursiva del oficialismo consiste en pedirle a los ciudadanos que apuesten por el futuro para no volver al pasado. Sin embargo, para Gilberto Alegre el pasado -al menos el de General Villegas- es el horizonte hacia el que hay que caminar: «El pasado que tuvimos no fue malo, lo difícil es este presente sin expectativas. Con nuestra gestión cambiaron Villegas y los pueblos. En el 2015 no era candidato, hoy sí soy candidato y vuelvo para tratar de ordenar todo esto. Antes había barrios, salud, viviendas, desarrollo comunitario, las instituciones se sentían apoyada. Teníamos una rica vida comunitaria que hacía que se viviera de una determinada manera. Hoy se vive en una medianía. La gente quiere volver a vivir bien», reflexionó.
Alegre no ahorró en críticas hacia la gestión de Campana: «Ahora lo único que hacen es firmar convenios, pero no solucionan nada. Por ejemplo, cuando la gente habla de universidad piensa en carreras de grado. Lo único que trajeron son tecnicaturas que se podrían hacer en el Colegio Nacional si se firman los convenios. El único establecimiento que tiene carreras de grado es el CEAM, que tiene contadores y abogados. Pero ellos descalifican ese sistema porque lo veníamos realizando nosotros. El CEAM era proyección hacia el siglo XXI. El mundo se está manejando de esa manera: con la educación virtual y la tecnología. Esto no debería ser confrontativo, sino integrador. No entiendo la necesidad de competir y descalificar lo de antes. Es una política mezquina», sostuvo.
También hizo alusión a la versión, que empezó a circular hace algunos días, que asegura que despedirá a muchos empleados municipales en caso de asumir: «Quieren debatir cortinas de humo de hace 24 años, hablan de que eché a empleados hace 24. Pero después de eso: ¿Cuántas elecciones gané? ¿Si no tuvo trascendencia en las otras elecciones, porque tendría trascendencia ahora? La elección es más compleja que solo La Trocha o los empleados municipales. Es intrascendente en una comunidad donde hay más de 20 mil votantes. Es faltarle el respeto a la comunidad», señaló.
Mensaje a la gente
«Les entró la urgencia para tratar de resolver todo en estos últimos días. Eso es tomar a la ligera la inteligencia y la capacidad de la gente. Estoy convencido que la gente va a querer tener un gobierno presente. Campana ha estado ausente, no ha atendido a la gente. Hay un abandono de las instituciones en los pueblos. Por eso les pedimos que nos acompañen con su voto, nuestra propuesta es muy clara: nosotros ya lo hicimos, no tengo que explicar cómo lo vamos a hacer. Se puede hacer porque nosotros ya lo hicimos», concluyó.
