ACTUALIDAD dialogó con José María Sosa Covián. El director de diario «Noticias» de Rufino era amigo íntimo de Rosanna Baggini, con quien se vio por última vez el viernes pasado en esa ciudad, en la provincia de Santa Fe.
«Fue todo muy sorpresivo e inesperado. La vi el viernes, cuando llegaron de vacaciones junto con su mamá desde San Luis y la nena, que jugaba mientras nosotros charlábamos. Es una situación fea, muy triste. Es algo inexplicable», dijo José María.
El periodista, amigo de la víctima, sostuvo que «seguimos pagando con sangre y lágrimas la inoperancia de nuestros dirigentes. La Ruta 33 no duró absolutamente nada. El último arreglo integral fue en 2006 y a los pocos años ya estaba tremendamente rota y sigue así. Sólo emparchan. Y si me dicen que no había pozos, las banquinas están llenas de yuyos y la zona del préstamos inundada. Es todo inoperancia de quienes nos gobiernan, tienen que poner las cosas en su lugar y hacerlas bien de una vez por todas».
Si bien el estado de la Ruta no fue un tema del que hablaron el viernes, cuando se vieron por última vez, «era algo de lo que charlábamos cuando nos escribíamos cada semana. Entre Rufino y Cañada Seca es tétrico; y quienes van más allá nos comentan que es muy peligroso».
José María comentó que si bien Rosanna nació en Villa Saboya, vivió también en Santa Eleodora y después llegó a General Villegas, donde hizo la carrera docente. Tenía dos hermanos, además de su madre y su hija de 4 años, que falleció junto a ella en el accidente.
«Teníamos 14 años cuando nos conocimos», comentó; al tiempo que se refirió a la convocatoria que se estaba realizando en nuestra ciudad para reclamar por el estado de la Ruta 33.
«Ojalá que se tome conciencia y que se pueda replicar en todas las comunidades. Tiene que ser una lucha de todos. De una vez por todas que hagan lo que tienen que hacer. Son 100 kilómetros, no es mucho. Sabemos que hay un proyecto, pero no sabemos si con el nuevo gobierno se va a concretar. Si bien todos estamos expuestos a sufrir un accidente, si las condiciones de la Ruta son buenas las posibilidades disminuyen. De una vez por todas se tienen que tomar medidas. Ojalá que la manifestación sirva y que la muerte de Rosanna, su hija y tantos otros que perdieron la vida no queden en vano, sirvan para sentar conciencia y que de una vez por todas se haga lo que se tiene que hacer, de la forma que tiene que hacerse», concluyó José María.