Bichos de Campo tomó una noticia muy gratificante aparecida este domingo en el diario El Tribuno de Salta, que fue escrita por el colega Antonio Gaspar. Y desde Diario ACTUALIDAD hicimos otros tanto.
Cuenta la historia de dos mujeres que han encontrado una manera muy efectiva y sencilla de promover las huertas familiares, repartiendo las semillas necesarias como vuelto en ciertas compras. Dice el artículo:
Dos mujeres son las protagonistas de una nueva entrega de la página de los oficios. Juntas son potencias, no se puede hacer notas por separadas y se puede llegar a decir que el oficio de reciclar y reutilizar fue lo que las unió en una nueva aventura.
Ellas comenzaron a desarrollar una idea que golpea de frente a todo un viejo paradigma: la semilla como principio de la economía.
Su emprendimiento consiste en brindarles a los comercios de la ciudad una caja con sobres que contienen semillas de plantas que crecen en el Valle de Lerma para que las entreguen como vuelto.
Basta ya de caramelos, saquitos de té, caldos, vales sellados o firmados, papeles que reemplazan a las monedas de 5 pesos o más. Los quioscos de la ciudad tienen que comenzar a entregar semillas para que los vecinos comiencen a darle una vuelta de rosca a su forma de ver el mundo; es hora de comenzar a tener una huerta en casa.
Es otra mirada de ver el mundo. El proyecto tiene el nombre de “Moneda Verde” y es para comenzar a desarrollar la conciencia social sobre el manejo de la basura, la alimentación saludable y el cuidado del ambiente.
Las semillas son poderosas. Están envueltas en papel de diario El Tribuno que es 100 por ciento reciclable. Sobres pequeños que se colocan directamente en la tierra y se riegan.
“La idea es promover la huerta en casa. En los sobres están indicados los cortes y las profundidades de hasta dónde tienen que ser enterradas las semillas. Todo es biodegradable y de una huerta orgánica ubicada en Cerrillos. Son todas plantas que se dan en abundancia en el Valle”, dijo Rosana Ely Carabajal, quien es la que pone la pata de huerta.
La otra pata es la de reciclaje. “Utilizamos el diario que todos tiran y que tapan las alcantarillas. Con las semillas y las huertas promovemos la separación de la basura diferenciando todo lo orgánico para reutilizarlo como compost. Además, buscamos que la tendencia vaya a la alimentación saludable”, dijo Soledad Sales.
Cada caja que tienen para entregar a los comerciantes tiene 100 sobres con un costo total de 500 pesos. Es decir que es ideal para entregar vueltos de entre 5 y 10 pesos.
“Si bien ya venimos con este desafío por más de un año, en este mes de la Pachamama queremos darle la difusión total. Los sobres tienen la forma de un contenedor de almácigo, con forma de útero; todo es muy simbólico”, dijo Sol.
Hay semillas de acelga, cebolla, zanahorias, rabanitos, lechugas, zapallo tronquero, albahaca, perejil, rúcula y de otras tantas plantas aromáticas.
“En nuestra página en internet, además, se brinda toda la información para desarrollar orgánicamente la huerta. Hay todo un acompañamiento, no es solo entregar las semillas y nos olvidamos”, dijo Rosana.
Reconocimiento. Como si fuera poco, el proyecto de Sol y Rosana fue elegido por la fundación Mayma dentro de 35 proyectos nacionales y ya comenzaron a tener vinculación con grandes empresas, incluso con los organismos internacionales.
“Nosotras recibimos mucha capacitación de Mayma y acá queremos mencionar a nuestro mentor que es Nicolás Gada, quien fue el que nos iluminó el camino”, dijo riendo Sol Sales.
Por último, ellas quieren advertir que no es una idea que se hizo para ganar plata. Todo el dinero que se va recaudando está destinado a apadrinar a comedores y merenderos comunitarios con el fin, además, de desarrollar en cada uno de ellos más huertas orgánicas.
Sobre la fundación. Mayma es un programa de apoyo a emprendedores, donde, a los emprendimientos seleccionados se les brinda formación sobre aspectos de negocio, desarrollo de habilidades para emprendedores y permite que ese emprendimiento se conecte con otros. Es decir, es un programa de apoyo a emprendedores que da formación, conexión y visualización. Se hace una elección de los mejores proyectos Salta-NOA y luego van a una final nacional, donde compiten con Córdoba, Rosario, Buenos Aires y Puerto Madryn.
Este programa, que se implementa en Salta-NOA, se desarrolla gracias a la coordinación del Ministerio de Desarrollo Social de Salta y la Ucasal. El proyecto de Sol participó del programa de fortalecimiento para emprendedores de triple impacto a nivel nacional. Su proyecto fue elegido en Mayma NOA.
Si bien la huerta proveedora de semillas está en Cerrillos, el lugar del trabajo final está en la casa de Sol, que es una casa “normal” de un barrio del este capitalino.
Es un espacio donde todo está reciclado, donde hay restos de botellas plásticas y de tarros de lo que sea por todos lados, por las mesas, por las paredes, en los colgantes del techo y hasta en la cocina, se ven los vasos de botellas obsoletas cortados artesanalmente que aún siguen cumpliendo una misión útil en este mundo.
Eso es lo que cambia: cuidar el mundo. Es toda una filosofía de vida consecuente en donde hasta lo más mínimo tiene la finalidad de no provocar más contaminación, de manejar la basura de un modo más eficiente.
Se enmarca dentro de una visión de mundo que se denomina “Ecofullness”, en donde todo parte de un tratamiento diferente de la basura.
Esta movida la comenzaron las chicas por el año 2017 organizando caminatas ecológicas en donde se brindaban, a los participantes, bolsas para recoger basura de la calle.
Luego siguieron con la fábrica de juguetes ecológicos. Se construyeron más de 500 juguetes con telas, con plásticos, latas y otros materiales sacados de la basura y que se repartieron en Abra Pampa, Santa Victoria Este y en la localidad anteña de El Quebrachal.
En la casa aún hay rastros de muñecas de trapo y autos de madera.
También están en carpeta los proyectos del Jardín Comestible y la Huerta Kid.
“La idea es reutilizar la materia prima para no contaminar tanto a nuestro ambiente”, dijo Sol al explicar que el proyecto de Moneda Verde se encuentra dentro de toda una forma de ver la vida. (Bichos de Campo/El Tribuno)