Estamos a siete jornadas del final, y las cosas en el liderato siguen estando muy apretadas, además de que los equipos que siguen peleando por abajo, han tenido también buenos encuentros y una que otra sorpresa, pero también alguna que otra decepción. La igualdad es la tónica hasta el momento en la competición, algo que las apuestas deportivas en Argentina no pasan por alto a la hora de establecer a las escuadras con más opciones de título.
El Atlético Tucumán vuelve a la cima del torneo, tras los descalabros de los últimos cuatro partidos. El partido tuvo sus buenas emociones, hasta que el Decano, en el último momento, se llevó la victoria contra el Argentinos Juniors en La Paternal.
Antes de ser expulsado, Cristian Menéndez hizo un doblete que marcó la diferencia en el resultado, por lo que los dirigidos por Lucas Pusineri ahora dependen exclusivamente de ellos mismos para mantenerse en el liderato y conseguir el campeonato.
En tanto, el Juniors pudo descontar, intentando hacer la hombrada, también al final, aunque el tiempo se terminó antes de poder conseguir algo más, luego de que la defensa de Tucumán cerró todos los huecos y no dejó espacio para que se pudiera dar la remontada.
Ahora, con 38 puntos, nada está escrito, porque son sólo dos los que lo separan de sus más cercanos perseguidores. En el ámbito del fútbol, sobre todo en argentina, podríamos decir que prácticamente hay un empate técnico entre tres equipos.
El segundo sembrado hasta el momento, el Gimnasia, dejó ir la posibilidad de ponerse de líder en el último instante del partido ante el Esgrima. El empate parecía sellado, pero en el descuento, Gonzalo Torres, que ingresó de cambio por Renzo López, recibió un pase en el área para fusilar con derechazo al ángulo para firmar el 1-0 en favor de Central Córdoba. Esta victoria es muy importante, porque los pone en la pelea de la tabla de promedios, y deja lejos a Patronato y Aldosivi.
Por su parte, el Boca Juniors también dejó pasar la oportunidad de la derrota de su rival, pues con eso podía ponerse líder, pero sólo consiguió empatar con un modesto Huracán que supo plantarse bien y anular cualquier ataque.
Parece que la presión que le metieron al Boca las victorias del River y del Racing los desconcentraron, y no pudieron sacar los tres puntos de la Bombonera como todo el mundo pensaba que sucedería. Lo peor de todo es la sensación que dejaron en la cancha, de pobre rendimiento y casi de derrota.
Y justo cuando el River Plate debía volver a la senda del triunfo luego de dos dolorosas derrotas consecutivas, en el superclásico y contra Banfield, el Monumental volvió a gritar. A pesar de las fallas defensivas que se han visto claras en los últimos encuentros, y con la presión sobre los dos equipos por conseguir el triunfo, San Lorenzo no pudo evitar un derechazo de Emanuel Mammana que terminó moviendo las redes. Pero, de nuevo, el Millonario terminó con 10 hombres tras la expulsión de Marcelo Herrera. Si bien se llevaron los tres puntos, bien podría haber quedado empatado y nadie hubiera dicho que alguno de los dos equipos merecía la victoria.
En más resultados, el Defensa y Justicia avanza en su recuperación con nuevo director técnico, al vencer 2-1 como visitante al Estudiantes.
Con su cuarto triunfo consecutivo, Independiente venció a Unión por 1-0, mientras que el Arsenal no tuvo piedad del Aldosivi y lo goleó por 3-0, un golpe que los pone en la zona de peligro por el descenso.
El Racing venció al Platense como visitante, colocándose de nuevo en la parte alta de la tabla, a la espera de algún descalabro que puedan aprovechar para colarse en la punta; el Tigre le ganó al Vélez 2-0 en un partido que tuvo en la platea al director técnico de Gimnasia; Barracas Central se confirma como un local de cuidado, puesto que ha ganado los últimos cuatro encuentros en su casa, esta vez, venciendo al Godoy Cruz.
Las cosas entonces se ponen interesantes de cara al final de la temporada, y las apuestas que antes apuntaban a un claro campeón con el Tucumán, ahora no están tan seguras de lo que pudiera suceder. Emoción al máximo, como debe de ser en el fútbol argentino.