Jonathan Emmanuel Belgamase tiene 30 años y con el 16 en la casaca se convirtió en una de las figuras del Club Atlético Villegas, del que es fanático, al patear un penal. Conocé esta historia de amor y de inclusión. El portal InfoCielo se hizo eco de su historia de vida.
Yoni, como lo conocen todos, trabaja hace casi 9 años con Eduardo Irasola, actual vicepresidente del Club Atlético Villegas, en su distribuidora veterinaria: «Es el gerente de la alegría, es el que aporta buen humor, picardía, lo amamos», contó acerca del clima laboral cuando está el joven presente.
¿Quién es Jonatan, El Mortero del Club Atlético Villegas?
En diálogo con Infocielo, Ado Irasola, vicepresidente del club del barrio Madreselva, contó cómo surgió este ejemplo de inclusión, primero en el trabajo y después en la cancha: «Ha ido progresando desde la primera vez que lo entrevisté para tomarlo, yo tenía la inquietud siempre de tomar algún chiquito y darle la posibilidad de trabajar en blanco, que se jubile. Y lo hablé con la gente de ADERID (Asociación Civil sin fines de lucro dedicada al desarrollo, rehabilitación e integración de PCD) para que cuando tuvieran a una persona que se adapte a querer trabajar y a ser feliz trabajando yo estaba dispuesto a asumir ese compromiso», detalló.
«A través de que entró a trabajar y que yo era presidente del club se involucró muchísimo, va a todos los partidos. Y como él siempre quiere jugar, quiere llenar las fichas de Atlético. En el clásico con Eclipse Villegas pateó por primera vez un penal, lo festejó a lo Cavani en la tribuna nuestra y la hinchada se venía abajo gritando Yoni corazón, es un chico muy querido», describió Irasola acerca de este momento que ya es viral.
«Yoni tiene síndrome de down, precisamente estos chicos tienen el encanto de tener solamente condiciones buenas, tienen anulado lo que es la maldad, lo que es la envidia, los celos. Yoni tiene solamente alegría, él desayuna con los jugadores de tercera los domingos en el club y almuerza con los jugadores de primera y entra a la cancha con ellos», señaló el vicepresidente del club.
Jonathan es querido donde sea que esté: «La familia está chocha, al tener un trabajo digno, por supuesto lo hace muy bien, se encarga de varias actividades dentro de la empresa, eso hace que con la familia tengamos una relación buena. Nosotros lo vamos a buscar todos los días a la casa, él trabaja medio día, el otro medio día va a la escuela ADERID y a la tarde trabaja en VIA, que es mi empresa Veterinarias Integradas de Argentina», manifestó Irasola.
Un mensaje de inclusión al empresariado
«En la entrevista Yoni estaba muy nervioso, yo le hice un par de preguntas como si entrevistara a cualquiera de las personas que tomo como recurso para trabajar y hasta que por ahí le digo ‘¿de qué hincha sos?’, y me dice ‘de Boca’, ‘Uy, yo también soy hincha de Boca, nos vamos a llevar bien’, y ya tuvimos un punto en común. Después empezó a trabajar y cada día mejor. Y hoy es imprescindible, siempre le digo a mi gente ‘si algún día me toca que me va mal y nos fundimos, Yoni y yo somos los últimos que apagamos la luz'», bromeó el vicepresidente del club.
Manu es otro joven con discapacidad y trabaja en el cuerpo técnico en las inferiores del club: «Lo adoran los padres, los chicos, los profes, es compañero de Yoni en ADERID y trabaja con nosotros hace cuatro años como ayudante de campo y es imprescindible también, tiene un espacio dentro del club y por supuesto le generamos un ingreso que le hace muy bien a él y a su familia», agregó Irasola.
«Muchas veces el empresariado no se anima a tener alguien con algún tipo de dificultad y no se imaginan lo importante que es para unir los grupos de trabajo, el cariño que transmiten, yo tengo una empresa diferente desde que está Yoni», resaltó el vicepresidente del Club Atlético Villegas.
Fuente: InfoCielo