El Lobo cumplió y pasó por arriba al Lagunero, con lo que se mantiene en la punta del Torneo Clausura. Fue 5 a 2 en Piedritas.
Santa Rita debía ratificar su buen momento ante Cañada Seca. En los papeles, por fútbol, resultados y plantel, el equipo piedritense era el gran favorito. Pero como siempre se dijo en este deporte, nadie gana un partido por la candidatura. Todos deben confirmar ese poderío en el terreno de juego. Y el Lobo lo hizo. El Anyulín Penacino, listo para recibir uno de los duelos de la novena fecha del Torneo Clausura.
Los primeros minutos fueron de ida y vuelta. La visita trató de presionar en zonas altas del campo y evitó replegarse. Al local le costó acomodarse en la cancha, pero cuando encontró la posición de sus jugadores, empezó a manejar el balón.
El primer aviso de los de Camino fue una escapada de Gaspár y un centro que, por muy poco, Ferreyra no logró conectar. Santa Rita no tardó en responder, mediante una gran jugada del Choco Farías, que incluyó un sombrero a Llanes y un remate de volea que Domínguez se encargó de sacar.
Pero apareció la primera conquista de la tarde, a través de un desborde de Peters, quien metió un envío al área para la posición de Verón, que como si fuera un goleador de toda la vida, conectó al primer palo y estableció la ventaja local. La Bruja hacía de las suyas.
A partir de allí, Santa Rita se hizo amo y señor de la tenencia del balón. Movió la pelota de lado a lado y jugó con la desesperación visitante. El equipo cañadense apostó a los contragolpes, caracterizados por la velocidad de Gaspár y Ferreyra.
Pero en una jugada aislada, el conjunto visitante encontró la igualdad. Schpether se equivocó en el fondo, por lo que Ferreyra capitalizó el error, se metió en el área y fue derribado por el zaguero central. Vázquez se hizo cargo de la ejecución, rematando fuerte y cruzado para decretar el empate.
Parece que la igualdad despertó al dueño de casa, que dos minutos más tarde avisó con un tiro libre de Ledesma que hizo volar a Domínguez. El propio arquero evitó el tanto de Farías, con un manotazo salvador ante la definición por arriba del Choco.
Sin embargo, el Lobo obtuvo recompensa y en un abrir y cerrar de ojos, liquidó el partido. Verón ejecutó un tiro libre al área y Riscosa, con un testazo goleador, le cambió la trayectoria a la pelota para el 2 a 1. Si el gol es de pelota parada, Pita es su autor.
Ese minuto fue catastrófico para Cañada Seca, que salió jugando desde el medio, Santa Rita recuperó rápidamente y, luego de los intentos fallidos de Verón y Mendoza, Farías la terminó de empujar al fondo de la red para certificar el tercero del local.
En el complemento, los de Tabasso fueron los dueños del terreno de juego y el repertorio se hizo valer. Poco pudo hacer la visita, que se encontraba lejos en el resultado y en el juego.
Otra buena jugada colectiva del local culminó con la definición de Peters y la buena respuesta de Domínguez. Instantes después, Llanes salvó de forma providencial el cuarto gol del partido, ahogando el grito de Farías. Nuevamente el Choco: definió por arriba y la pelota se fue elevada.
Pero tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe. Verón realizó un balón parado al segundo palo, para la posición de Farías, que conectó de cabeza, Domínguez respondió y, casi de arremetida, el Choco convirtió el cuarto. Partido liquidado y clima de fiesta en el Anyulín Penacino.
Brian Mendoza, siempre tan incisivo, fue volteado en el área y, un Guevara de corecta actuación, marcó el segundo penal de la tarde. Y quién otro si no es Peters. El goleador del Lobo pateó fuerte, abajo y a la derecha, para poner el 5 a 1. Un remate infalible, de un jugador infalible. Un resultado lapidario.
Solo hubo lugar para una mano de Actis en el área, que Guevara consideró penal para la visita. Matías Vázquez, otra vez, ejecutó con convicción su disparo, al palo derecho con violencia, y le puso cifras definitivas al partido. El famoso «gol del honor».
El resultado no se modificó, mucho menos el ganador. Pero sí se produjeron varias chances antes del cierre. Ferreyra no pudo con Chapado en un mano a mano. Luego, Regis disparó cruzado y se fue cerca. Mientras que los ingresados, Busto y Muñóz, también contaron con posibilidades de anotar el sexto, que nunca llegó.
Fue un triunfo sin discusiones de Santa Rita, que ganó de forma cómoda y justificada. Demostró todo su poderío con el fútbol desplegado en la cancha. Muchos puntos altos en un equipo que cada vez gusta más. Cañada Seca sucumbió sin apelar al juego brusco y entendiendo el nivel de su rival. El Lagunero intentará terminar de la mejor manera posible esta temporada y pensar en mejor su rendimiento en 2025.
Una nueva demostración de carácter de los de Tabasso. Parecen afianzarse cada vez más. Y lo hacen en esta parte final del campeonato. El próximo escollo estará en Coronel Charlone. Es el que mejor parado está para la última recta del Clausura. Se encuentra puntero, con los mismos puntos que Atlético Villegas, y ya quedó libre. Pero por sobre todas las cosas, cada vez juega mejor.
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Santa Rita 5 (Claudio Farías -2-, Nicolás Verón, Guido Riscosa y Ramiro Peters -P-)
Joaquín Chapado, Martín Schpether, Andrés Ledesma, Santiago Filippi, Guido Riscosa, Santiago Piovani, Brian Mendoza, Claudio Farías, Ramiro Peters, Nicolás Verón y Gastón Regis. DT: Paulo Tabasso.
Suplentes: Miguel Pérez, Lautaro Suñe, Braian Actis, Juan Barbera, Genaro Muñóz, Eber Gómez y Maximiliano Busto.
Cambios: Braian Actis por Martín Schpether, Genaro Muñóz por Ramiro Peters y Maximiliano Busto por Brian Mendoza.
Cañada Seca 2 (Matías Vázquez -2P-)
Lisandro Domínguez, Felipe Domínguez, Fabián Servera, Mariano Llanes, Patricio Reimers, Diego Moreno, Francisco Ferreyra, Darío Madero, Matías Vázquez, Romás Gaspár y Alexis Peña. DT: Sergio Camino.
Suplentes: Mauricio Molina, Mateo Lisiardo, Lucio Madero, Mateo Domínguez, Bautista Abalos y Julián Palavecino.
Cambios: Lucio Madero por Darío Madero.
Árbitro: Marcelo Guevara.