Cada 29 de abril se celebra en Argentina el Día del Animal, una jornada que invita a reconocer el valor de todos los seres vivos que nos acompañan, desde los animales de compañía hasta aquellos que aún esperan un hogar. Es también una oportunidad para reflexionar sobre nuestro compromiso con su bienestar.
La tenencia responsable no es solo un acto de amor, sino una obligación ética. Implica brindar alimento, atención veterinaria, contención emocional y, sobre todo, evitar la reproducción descontrolada. La castración es una herramienta clave para prevenir el abandono y reducir la cantidad de animales callejeros que muchas veces viven en condiciones de extrema vulnerabilidad.
En General Villegas, tanto el Centro de Esterilización Municipal como APAVI (Asociación Protectora de Animales de Villegas) cumplen un rol fundamental en esta tarea. El Centro de Esterilización realiza castraciones gratuitas, fomentando una política pública de control ético de la población animal. Por su parte, APAVI trabaja incansablemente para rescatar, rehabilitar y encontrar familias responsables para perros y gatos que han sido abandonados o maltratados. Además, promueve campañas de concientización y jornadas de adopción.
Colaborar es más fácil de lo que parece: se puede ayudar donando alimento, insumos veterinarios, ofreciendo tránsito temporal, difundiendo casos de adopción o simplemente educando a nuestro entorno sobre la importancia del respeto hacia los animales.
Hoy, más que nunca, recordamos que los animales no son cosas: sienten, sufren y aman. Este Día del Animal, que sea un llamado a la acción y a la empatía.
¿Cómo cuidar mejor a nuestras mascotas?
En el marco del Día del Animal, la veterinaria Laura Millán compartió su experiencia diaria en la atención a perros y gatos, con el objetivo de concientizar sobre una tenencia responsable y el bienestar de los animales de compañía.
Laura señaló que una de las consultas más comunes en su consultorio son los casos de gastroenteritis, especialmente los lunes y martes. “Generalmente el domingo hay asado familiar y a los perros les dan sobras con grasa, o huesos, que terminan provocándoles vómitos y diarreas”, explicó. En este sentido, recomendó la comida casera, que «puede ser muy buena si está bien balanceada con carne y verduras. La grasa y los huesos nunca, jamás”, ya que son los principales causantes de problemas digestivos.
La veterinaria también hizo hincapié en la importancia de evitar errores comunes, como medicar a las mascotas con ibuprofeno u otros analgésicos de uso humano. “Las dosis son distintas, y pueden hacerles muchísimo daño”, remarcó. Otro punto clave es la vacunación: “Muchos aún no saben que la vacuna quíntuple o séxtuple debe reforzarse una vez por año, igual que la antirrábica, que es obligatoria por ley”.
Sobre el bienestar cotidiano, Laura recomendó una alimentación adecuada, mantener a los animales dentro del hogar y ofrecerles paseos diarios con correa. Además, destacó la importancia de observar cambios en sus rutinas, ya que pueden ser señales tempranas de enfermedades. “Con los gatos, por ejemplo, si empiezan a hacer pis fuera del arenero, es una señal clara de que algo no anda bien. En el caso del perro, se lo puede notar alicaído”, explicó.
Consultada por su opinión respecto a la adopción por sobre la compra de mascotas, sostuvo que ambas son válidas: “Lo ideal es adoptar, sobre todo por la cantidad de animales en la calle, pero si alguien busca ciertas características de temperamento, no está mal optar por un perro de raza. Lo que sí es importante es cómo están criados en los criaderos, ahí está el problema”, advirtió.
Además, reflexionó sobre el error de humanizar a los animales: “A veces los dueños piensan que lo que tienen es psicológico, y en realidad el animal está enfermo. Cuando llegan a la consulta ya están muy mal, y eso complica el tratamiento”.
Por otro lado, compartió el costado más emotivo de su profesión: “Lo más lindo es cuando rescatás un animal de la calle, lo curás, y después conseguís una familia que lo quiera. Y lo más triste, sin dudas, son las eutanasias. Después de tantos años, es algo que todavía me cuesta mucho”.
Laura es de Capital Federal, pero desde hace 13 años eligió General Villegas para vivir y trabajar. Desde los 8 años decidió que iba a ser veterinaria. «Nunca pensé en otra profesión», dijo. Y nos contó que cuando viajaba a la Costa siendo niña, «veía animales atropellados en la ruta y me ponía tan mal, que ya ahí quise ser veterinaria para poder atenderlos».
Con la compañía en su hogar de una perra que se llama Francisca y una gata, «Yuki», sus palabras invitan a reflexionar sobre nuestro rol como cuidadores y a asumir con responsabilidad y amor el compromiso que implica tener una mascota. ¿Estás cuidando bien a la tuya?

Por qué el 29 de abril
El Día del Animal se celebra en la Argentina todos los 29 de abril en conmemoración del fallecimiento de Ignacio Lucas Albarracín, un abogado que fue el gran pionero en el país en la lucha por los derechos de los animales.
Albarracín nació en Córdoba capital el 31 de julio de 1850 y tras obtener su título de grado, decidió dedicar su vida a la defensa de los animales. Opinaba que aunque estos tuviesen un nivel de raciocinio inferior respecto del hombre, no se debía martirizarlos ni castigarlos.
Fue secretario de la Sociedad Argentina Protectora de los Animales desde su inicio (1879) y sucedió a Domingo Faustino Sarmiento en su presidencia, en el año 1885. Desde allí fue un precursor en la lucha contra las riñas de gallos, la doma de potros, corridas de toros y tiro a la paloma.
De hecho, fue el mayor impulsor de la Ley Nacional de Protección de Animales (N° 2.786) que se promulgó el 25 de julio de 1891. Este desarrollo que encabezó Albarracín fue la base legal que incorporó la Liga Internacional de los Derechos del Animal (1977) y la ONU.
Fue dueño de una modesta fortuna que le alcanzó para vivir decentemente hasta el final de su vida, el 29 de abril de 1926. Recién a partir de 1908 la fecha de su fallecimiento fue utilizada para conmemorar al Día del Animal.
“El loco” lo apodaba la gente, porque protagonizó un sinfín de episodios extraños para su época en su denodada defensa de los animales. Por ejemplo, se ponía delante de los carruajes tirados por caballos para evitar que fueran maltratados. Organizaba campañas en contra de las corridas de toros, las riñas de gallos y el tiro a las palomas cuando estas eran actividades socialmente aceptadas y bien vistas para la recreación de la gente.
También se opuso a la existencia de los zoológicos y de los circos. De esta manera, Albarracín luchó contra todas aquellas prácticas en las que de una u otra manera, los animales eran maltratados.
También el 4 de octubre
A excepción de Argentina, el Día Mundial del Animal se celebra en el resto del mundo el 4 de octubre, conmemorando a San Francisco de Asís, el santo católico que se despojó de todas sus riquezas y dedicó su vida al servicio no sólo a sus semejantes sino también a todos los animales.
San Francisco nació en Asís (Italia) dentro de una familia acomodada en 1182. Consideraba a los animales hijos de Dios y los llamaba «hermanos». Se dirigía a ellos y se dice que ellos lo escuchaban hasta el punto de obedecerle y es famosa la intervención que tuvo en Greccio al lograr que un lobo salvaje no atacara a la población.
En 1929, esta fecha fue declarada Día Mundial de los Animales, por iniciativa de la Organización Mundial de Protección Animal en congreso celebrado en Viena. En 1980, el papa Juan Pablo II declaró a San Francisco de Asís como patrono de los animales y de los ecologistas.